Un joven relató la problemática que lo llevó a perder cerca de 400 mil dólares en casas de apuesta y casinos digitales. Según los relatos del adolescente, inició con el juego cuando tenía 14 años en el recreo con sus amigos de la escuela e incluso llegó a robarle a sus padres para poder seguir jugando.
Además, la problemática no quedó ahí, sino que también pidió prestamos con intereses altísimos para continuar con las apuestas.
Ante esta situación, a Max le llegaron distintos mensajes para que cumpliera con los pagos del préstamo y por tal motivo, borró la aplicación pensando que el inconveniente quedaría ahí, pero a los pocos días le llegó una carta documento de un estudio de abogados para que pague la deuda.
«Ahí le tuve que contar todo a mi mamá y le prometí que no iba a jugar más», dice. A los pocos días, empezó a jugar otra vez.
En relación a los 400 mil dólares explicó que en una ocasión le ayudó a su padrastro instalar una billetera virtual y se quedó con las respectivas contraseñas. «Primero le fui sacando de a 40 dólares. Después de a 400, y un día llegué a perder 250 mil dólares que llegaron a ser 400 mil dólares», explica, por la subida del Bitcoin.
«Es una sensación horrible. Sentís vergüenza, sentís miedo. No querés hablar con nadie», reconoció Max de manera nerviosa.
Ya pasado dos años de todo lo sucedido, hoy con 16, se reconoce como un jugador en recuperación y expuso que se «arrepiente de no haber parado cuando podía hacerlo».